No podemos sobrevivir a las mujeres. Por fortuna, estamos condenados a convivir con ellas. Y eso es maravilloso en un gran número de ocasiones, por que ellas saben ser personas amables, fuertes, comprensivas y generosas, entre muchas otras virtudes. Pero nadie es perfecto, y la mujeres no son ángeles, también tienen sus defectos, como cualquiera de nosotros, y a la vez pueden ser tremendamente inseguras, celosas, resentidas, manipuladoras y vengativas. Esto no las hace especialmente perversas, por que al fin y al cabo son personas, y como tales, está hechas de la misma materia que nosotros -aunque quizás con otro espíritu- Y quien esté libre de pecado que tire la primera piedra.
El cambio de costumbres y concepciones acerca del papel de la mujer en la sociedad ocurrido en los últimos decenios -y si lo pensamos bien, quizá en el último siglo- ha sido altamente positivo y valioso. Y no negaremos el inestimable valor de todas aquellas personas, mujeres y también hombres, que han luchado contra a injusticia manifiesta que representaba la situación de la mujer, y siguen luchando contra las barreras y desajustes que todavía se producen.
Sin embargo, el cambio de modelo con respecto a las relaciones entre hombres y mujeres y al estátus de las mujeres en el ámbitoprivado y público, resulta cuando menos confuso. Tanto que ni siquiera las misas mujeres se ponen de acuerdo en cómo debe de ser el código implícito de comportamiento y no han sabido transmitirnos unas normas y valores básicos y bien asentados. Hoy en día una mujer es capaz de decir que todos loshombres son unos cerdos, o si se ponen más finas, afirmará que son todos unos obsesos sexuales, egoistas y zafios sin que se les mueva una pestaña, pero reaccionará violentamente si un hombre expone una opinión sobre las mujeres tan tajantemente reductiva y ofensiva como la que ella ha realizado. Pruebe a decir en una reunión que todas la mujeres son esto y lo otro. Atraerá las más airadas réplicas. ¿Qué clase de igualdad estamos pretendiendo? Lo mismo sucede en otros ámbitos. En 2008 la priodista Teresa Viejo publicó un libro titulado "Hombres: manual de uso y disfrute", que pasó sin pena ni gloria por las librerías de nuestro país. Podríamos preguntarnos cuál sería la reacción si a alguien se le ocurriera escribir un libro titulado, dándole la vuelta al otro, "Mujeres: manual de uso y disfrute"
Y ellas tienen todas las excusas del mundo. Durante gran parte de la historia han sido minusvaloradas y reprimidas, y aún lo son en muchas partes del mundo. ¿Significa eso que deben dar la vuelta a la tortilla en lugar de buscar un moelo de convivencia igualitario?
De eso trata este blog.
El cambio de costumbres y concepciones acerca del papel de la mujer en la sociedad ocurrido en los últimos decenios -y si lo pensamos bien, quizá en el último siglo- ha sido altamente positivo y valioso. Y no negaremos el inestimable valor de todas aquellas personas, mujeres y también hombres, que han luchado contra a injusticia manifiesta que representaba la situación de la mujer, y siguen luchando contra las barreras y desajustes que todavía se producen.
Sin embargo, el cambio de modelo con respecto a las relaciones entre hombres y mujeres y al estátus de las mujeres en el ámbitoprivado y público, resulta cuando menos confuso. Tanto que ni siquiera las misas mujeres se ponen de acuerdo en cómo debe de ser el código implícito de comportamiento y no han sabido transmitirnos unas normas y valores básicos y bien asentados. Hoy en día una mujer es capaz de decir que todos loshombres son unos cerdos, o si se ponen más finas, afirmará que son todos unos obsesos sexuales, egoistas y zafios sin que se les mueva una pestaña, pero reaccionará violentamente si un hombre expone una opinión sobre las mujeres tan tajantemente reductiva y ofensiva como la que ella ha realizado. Pruebe a decir en una reunión que todas la mujeres son esto y lo otro. Atraerá las más airadas réplicas. ¿Qué clase de igualdad estamos pretendiendo? Lo mismo sucede en otros ámbitos. En 2008 la priodista Teresa Viejo publicó un libro titulado "Hombres: manual de uso y disfrute", que pasó sin pena ni gloria por las librerías de nuestro país. Podríamos preguntarnos cuál sería la reacción si a alguien se le ocurriera escribir un libro titulado, dándole la vuelta al otro, "Mujeres: manual de uso y disfrute"
Y ellas tienen todas las excusas del mundo. Durante gran parte de la historia han sido minusvaloradas y reprimidas, y aún lo son en muchas partes del mundo. ¿Significa eso que deben dar la vuelta a la tortilla en lugar de buscar un moelo de convivencia igualitario?
De eso trata este blog.
Predicar en el desierto es muy cansado, pero suerte, mucha suerte. En especial porque en este momento y en esta sociedad, lo masculino se criminaliza y lo femenino se tiñe de un positivismo pacato. El buenismo de los progres, vigilado de cerca por sus respectivas amas y señoras, pueden producir sinsentidos.
ResponderEliminarPor cierto, el Día Internacional del Hombre se celebra el 19 de Noviembre y tiene como objetivos:
ResponderEliminar1. Promover modelos masculinos positivos.
2. Celebrar las contribuciones positivas de los hombres a la sociedad.
3. Centrarse en la salud y el bienestar social, emocional, físico y espiritual de los hombres.
4. Poner de relieve la discriminación contra los hombres, en las áreas de servicios sociales, las actitudes y expectativas sociales, y la ley.
5. Mejorar las relaciones de género y promover la igualdad de género.
6. Crear un mundo más seguro y mejor, donde la gente puede estar segura y crecer para alcanzar su pleno potencial.
Supongo que en aras de la igualdad, las mujeres no tendran inconveniente en que desde las instituciones se llegue a apoyar ese día igual que se hace con el Día de la Mujer. ¿O sí?...